El protocolo seguro de transferencia de hipertexto (Hypertext Transfer Protocol Secure o HTTPS), es otro de los (pocos) factores SEO confirmados oficialmente por Google. Se trata de un paso más en la apuesta del gigante de Internet por la seguridad y la autentificación de la identidad. De hecho, Google ya anima abiertamente a los propietarios de sitios web a realizar la transición de HTTP a HTTPS, y entiende que los sitios que incorporan este protocolo son serios sobre sus negocios a largo plazo.
El protocolo HTTPS funciona trasfiriendo de manera segura y cifrada los datos entre el servidor y el usuario, siendo utilizado en la actualidad por sitios de comercio electrónico, banca on-line, instituciones gubernamentales y toda web que requiera el manejo de datos personales. Este cifrado está basado en la tecnología SSL (Secure Socket Layer) o TLS (Transport Layer Security), una capa de conexión segura que hace uso de certificados digitales e impide que la transferencia de datos sea interpretada en caso de interceptación malintencionada. Los certificados SSL proveen a nuestro sitio web de seguridad en las comunicaciones encriptando la transferencia de datos entre el servidor y el usuario. En suma, El HTTPS no es otra cosa que la combinación del protocolo web tradicional HTTP con el protocolo SSL/TLS para comunicaciones cifradas.
En definitiva, y aunque estamos ante un factor SEO de influencia leve en el algoritmo de Google, la implementación del protocolo de seguridad debería ser tenido muy en cuenta por todos los sitios de comercio electrónico (el factor confianza es clave para aumentar las conversiones) y por todas las webs que manejen información sensible de sus usuarios como datos personales o financieros.
Dónde conseguir certificados SSL
Un certificado SSL no es otra cosa que un documento digital único que garantiza la vinculación entre una persona o entidad con su clave pública. El certificado incluye información como nombre, dirección, correo electrónico, organización y llave pública del propietario, así como información propia del certificado: periodo de validez, número de serie único, nombre de la autoridad certificada emisora y su firma digital, entre otros datos.
Los certificados SSL son emitidos por entidades certificadoras autorizadas, cuya misión es verificar la identidad de los poseedores del certificado digital, otorgando confianza a las dos partes de la comunicación.
Muchos proveedores de alojamiento web como Hostgator ofrecen certificados SSL gratuitos con todos sus planes de alojamiento, pero también se pueden adquirir de manera independiente. Teniendo en cuenta que Google recomienda los certificados de al menos 2048 bits, podemos implementarlos en los servidores y existentes y adquirirlos en servicios como:
GeoTrust: GeoTrust es uno de los líderes mundiales en certificación digital y seguridad SSL. El servicio ofrece una gran gama de productos adaptables a cualquier necesidad de autenticación a precios muy competitivos.
Godaddy: La conocida empresa ofrece precios muy económicos en sus certificados SSL. Sus diversas opciones nos permiten proteger los datos de nuestros visitantes con soluciones para un sólo sitio, varios sitios web o subdominios ilimitados. Todos los planes incluyen SSL para servidores ilimitados e instalación con un solo clic para los sitios ya alojados en el servicio de GoDaddy.
Comodo: La tecnología de Comodo ofrece altos niveles de seguridad gracias a la firma de 2048 bits y a su cifrado de 256 bits. El certificado muestra la verificación en tiempo real de nuestras credenciales de negocio cada vez que un visitante pasa el ratón por nuestro sello.Comodo ofrece protección SSL para sitios individuales y certificación ‘Wild Card‘ para subdominios ilimitados. Además, el servicio pone a nuestra disposición certificación SSL gratuita sin compromiso durante 90 días.
Symantec: Symantec Website Security Solutions incluyen gestión de certificados SSL, evaluación de vulnerabilidades y análisis de programas maliciosos. Symantec ofrece múltiples productos, pero el certificado básico ya incluye cifrado de hasta 256 bits y una garantía de 1.500.000 dólares.